Pruebas físicas policía Nacional preparación

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La preparación física de una oposición de Policía es indispensable para afrontar con éxito los diversos requisitos que se exigen en estas pruebas. Estos requisitos usualmente distinguen entre resistencia aeróbica, resistencia muscular, flexibilidad, estado de salud física, fuerza muscular y explosividad. Cada uno de estos aspectos requiere una preparación adecuada que se consigue mediante un entrenamiento específico.

Resistencia aeróbica: La preparación cardiovascular se debe enfocar tanto en la resistencia aeróbica como en la resistencia muscular. El objetivo es mejorar el rendimiento en situaciones de baja intensidad y en actividades físicas de mediana duración (correr, nadar, entre otros). Para realizar este tipo de entrenamiento se debe emplear suficiente tiempo en la zona aeróbica, lo cual significa trabajar con intensidades que se mantienen por debajo del umbral anaeróbico. Esto habitualmente se logra corriendo, nadando, caminando, montando en bicicleta, realizando ejercicios aeróbicos, etc. Regularmente se recomienda sesiones de entrenamiento de 30 a 60 minutos.

Resistencia muscular: La resistencia muscular se basa en fortalecer todos los músculos del cuerpo con el fin de mejorar la resistencia, mejorar la técnica y evitar lesiones. Los ejercicios aeróbicos se deben combinar con técnicas de fuerza muscular como levantamiento de pesas y ejercicios de resistencia. El objetivo es mejorar la fuerza muscular para resistir la fatiga durante las pruebas físicas de la oposición de Policía.

Flexibilidad: La flexibilidad es la capacidad de los músculos para extenderse y recuperar su posición original sin presentar desgaste extraño. La flexibilidad se debe mejorar mediante técnicas como estiramientos, y ayuda a mejorar la postura, prevenir lesiones musculares, mejorar la eficiencia del movimiento, etc.

Estado de salud física: La preparación física de una oposición de Policía incluye algunos exámenes que miden el estado de salud física. Estos exámenes normalmente incluyen mediciones de presión arterial, exámenes de sangre, pruebas cardiovasculares, entre otros. El objetivo de estos exámenes es determinar si el aspirante está en buen estado de salud para poder afrontar los requisitos de la prueba.

Fuerza muscular: La fuerza muscular se refiere a la cantidad de fuerza que se puede generar con un movimiento. La fuerza muscular se debe mejorar con ejercicios específicos de levantamiento de pesas. Este tipo de entrenamiento generalmente incluye ejercicios de prensión, press de hombro y de banca.

Explosividad: La explosividad se refiere a la capacidad de un individuo para producir esfuerzos significativos durante un periodo de tiempo muy corto. Esta capacidad se debe mejorar con ejercicios de resistencia muscular a alta intensidad, ejercicios de sprint y ejercicios de flexibilidad, entre otros.

En conclusión, la preparación física para una oposición policial debe incluir la preparación aeróbica, resistencia muscular, flexibilidad, estado de salud física, fuerza muscular y explosividad. Si bien los requisitos de la oposición pueden variar de una institución a otra, los principios de la preparación física se mantienen. Así que si estás pensando en presentar una oposición policial, es imprescindible que te entrenes adecuadamente para abarcar todas las áreas que se miden en esta prueba.

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